domingo, 13 de enero de 2013

Me debes una visita con abrazo incluido... (16º carta...)


A mi mitad... (16º carta...)

Me debes una visita... y un abrazo!

Eso será realidad en poco, por que así lo quiero.

¿¿Te acuerdas de esas risas?? ¿¿De ese lenguaje soez para conmigo??
Vaya maneras de vacilarme te traes niño!!
Son modos, que no malos modales, que a otro pueda asustar; a mi en anteriores días, me llegaban a intimidar, después de que nada me importaras. Al pasar a algo más, ahora hacen que quiera hacer lo mismo contigo.
Me resulta divertido!!
Te sentías tan a gusto, que ni te lo creías!!
Me contabas tantas cosas que ni sabías por dónde ibas... Por que claro, no se puede hablar a la vez que querer escuchar qué cada cosa hice y me faltó por hacer.
Todo va dentro de un orden, caballero.
Tu querer demostrar cierta dureza, conmigo no va... a mi no me engañas.
Ya sé cuándo son nervios, por tu forma de mirar y de rascarte la nariz... jejeje sé cuándo tratas de hacer broma y cuándo estas serio.
Se tanto... que no llego a saber el por qué no eres capaz.
Tanto te acercabas, con relax máximo, que luego te alejabas con inquietud repentina.
¿¿Por que luchas tanto contigo mismo... ?? Si supieras la confusión que eso causa en mi. Y si sólo fuera eso... confusión...
Habla más contigo mismo y escúchate!! Tienes mucho que decirte, para darte a pensar, que quizás no lo estés haciendo bien en ese terreno.
Por que, si algo te aporta felicidad, te hace sonreír, te llena de muchos modos y maneras. Te hace ver que puedas ser capaz de ver más allá de...
Qué más dará el qué dirán... si es que siempre van a decir, si no por una cosa, será por otra. Pero siempre habrá una habladuría, de la que no serás dueño ni capaz de manejar.
Ocúpate más de ti... quiérete, que eso te llevará a saber querer a terceras personas y ya que te pones... incluyeme entre ellas.
Aunque, no quisiera ser una tercera persona para ti. Ni tan siquiera la segunda... sino la primera. Estar como tú de mi, antes que yo.

Estabas a mil años luz, pero te voy acercando a mi... lo conseguiré.

Te recuerdo, que me debes una visita, con abrazo incluido.

Mi mitad... mi posible mitad... escucha con atención, lo que no voy a decir, ni escribir. Ni tan siquiera lo voy a pensar... sólo lo voy a sentir.
Cuándo te llegue, avísame.
Ahí lo llevas, en forma de suspiro; en el aire está.
Sé que duermes, pero te llegará como el rozar de unos labios que apenas besan; solo sienten.
Espero el mio.

Hoy con más dirección que nunca... sin más pero con mucho; me marchito a meditar...

A mi mitad...

No hay comentarios: